Diálogo estelar
"Existe magia en los cielos. Es esa magia que nos lleva a mirar hacia arriba, a explicar de alguna forma, nuestro lugar en el vasto Universo en que vivimos. Al final, somos polvo de las estrellas, nuestra química deriva de explosiones estelares antes mismo de la formación del sistema solar."
A dança do Universo, Marcelo Gleiser
Un gran espejo de agua refleja las estrellas más brillantes que se exponen en los cielos. Detrás de las luces de la ciudad de Buenos Aires podemos entrar en diálogo con un desconocido infinito de galaxias, estrellas, mundos y formas que llegan a la Tierra en algún tipo de radiación penetrando nuestras fugaces retinas. Cielos visibles en las 4 estaciones del año, exponen noche tras noche un ritmo y un circuito planetario dentro de una inmensidad ilimitada, son las 88 constelaciones reconocibles en nuestra época y cultura.
Esferas de platino y oro reflejarán miles de esferas estelares, devolviendo en su reflejo toda antigua luz que penetre el cielo. Manuscrito sagrado de puntos de luz, es leído desde hace milenios para entender los mensajes celestes. Esta tradición astrológica está presente en muchas culturas del planeta y cada una de ellas generó su propio mapa a partir de los descubrimientos y de la posición del ojo que observaba. El nacimiento de la astrología hace miles de años era una traducción de este manuscrito, describiendo la influencia de los cielos en el destino de las personas y en el uso de las plantas para la subsistencia. Con el descubrimiento de lentes, espejos y telescopios la astronomía no para de descubrir nuevos horizontes dentro de nuestra limitada visión del inmenso Universo que nos rodea.
Este cielo de piedra, agua, oro y platino llevará a los habitantes de Oceana Puerto Madero a levantar la mirada e intentar entender la magnificencia que nos rodea y comprender quizás nuestros orígenes en las estrellas.
Un basamento de piedra y una delgada piel de agua darán el plano de sustento para desarrollar los 88 mapas estelares de las constelaciones reconocidas. Cada estrella identificada será realizada en medias esferas de porcelana pintadas en platino que actuarán como espejos convexos reflejando todo. El todo incluye el propio cielo que es representado.
88 constelaciones realizadas en platino se extenderán posicionándose de norte a sur, creando un mapa que dará referencia a las constelaciones observadas en los diferentes hemisferios de la Tierra. El resto de las estrellas que acompañan a cada constelación serán pintadas en oro amarillo. Dando por resultado final un mapa estelar de 255m2 con 2.500 estrellas identificadas.
Leo Battistelli